Comienza un nuevo año

Ya estamos en Febrero. El año comenzó hace un rato y muchos se encuentran de vacaciones, y aquí estoy yo, un poco igual a la vez anterior, pero esta vez no me encargaron la editorial sino que osadamente me ofrecí.

Algunos ergocomicos se encuentran de viaje, buscando aventuras, inspiración y musas por las pampas argentinas, otros buscan el relajo en las costas chilenas y otros acá en Santiago de Chile, se relajan paseando por las un poco menos atestadas calles.

Por mi parte, opté por esto último. Me quedé en Santiago y me dediqué a varias de mis actividades favoritas: dormir, ver sitcoms, ir al cine, tomar cerveza y leer. Y, dentro de esto último, leer viejos comics que no hojeaba hace mucho, en realidad debo decir que estos últimos me los leí en el baño mientras esperaba que la naturaleza hiciera su trabajo, placer culpable, lo confieso.

Releí, por ejemplo, el Garage Hermético de Jerry Cornelius, varias Metal Hurlant y otras revistas viejas, sobre todo comic europeo que era lo que en esa época (los 80’s) me maravillaba. Recordé lo mucho que nos entreteníamos comentando, analizando, desmenuzando, porque no decirlo, copiando todo ese material fantástico que llegaba desde lejanas tierras. Fue esta interacción con en ese momento mis amigos, y más tarde compañeros ergocomicos, lo que acrecentó y alentó mi gusto por los comics y, por sobre eso, mi necesidad por hacer comics.

En esos años Moebius, Druillet, Bilal eran los campeones de la imaginación desatada en los comics. Angouleme era un festival maravilloso al otro lado del mundo. Pero aparte de la admiración contemplativa había una necesidad más urgente, una necesidad de contar historias y qué mejor medio que éste que nos encantaba, el comic. La suerte estaba echada.

10 años más tarde decidimos emprender un proyecto de sitio Web, el cual inicialmente se planeó como una forma de publicar barato y tener una vitrina hacia ese mundo que ponía tan próximo este medio tan omnipresente que es la Internet. Pero, con el tiempo, pasó algo que no habíamos considerado desde un principio en su real magnitud. Muchos empezaron a comunicarse con nosotros, haciéndonos llegar sus inquietudes, reclamos, alabanzas, críticas, opiniones y mucho material. Nos hemos encontrado con ese mismo ánimo que recuerdo y que dio el puntapié inicial, al menos en mi caso, para esta bonita aventura en que se ha transformado Ergocomics.

Por eso es que este año nos hemos propuesto buscar la manera de lograr una mayor interacción con ustedes, ya que nos hemos encontrado con gente muy valiosa con muchos ánimos de participar de distintas maneras. Estén atentos a las novedades que de a poco vamos a ir incluyendo en el sitio. Aparte del material con el que siempre tratamos de actualizar el sitio, también se viene una reestructuración importante. Lenta pero segura, lo advierto altiro.

Queremos acercarnos y que ustedes se acerquen. Pero tampoco crean que esto sería tan fácil, nos pondremos exigentes, pero eso lo sabrán más adelante.

Por ahora voy a seguir esperando que el calor pase, voy a seguir leyendo mis comics antiguos y planificando, planificando, planificando, que el año recién empieza y creo que se viene con muchas cosas buenas… bueno, buenas para el sitio porque de la situación mundial mejor ni hablar, a lo mejor ¿no sería mejor hacer un comic sobre eso?